Evitar ir al médico por ser trans: “Pedimos cita con el endocrino y nos mandan a psiquiatría”

MADRID
SERVIMEDIA

Casi la mitad de las personas transexuales ha evitado acudir a una cita médica por cómo son tratadas, según revela un estudio de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb) y Médicos del Mundo, que apunta a una “patologización” de estas personas en la sanidad pese a que la OMS ya no considere la transexualidad como enfermedad.

“Yo no quiero ser llamada como Víctor cuando estoy esperando a la consulta; ahí empieza el primer choque emocional de sentirte observada y vulnerable”, relató Vicky, una mujer transexual que ha participado en el primer estudio de este colectivo en el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Aunque el trato depende de cada comunidad autónoma -varía según exista una ley regional LGTB o no-, en prácticamente todos los sistemas de salud persiste una falta de “formación e información” sobre cómo tratar a pacientes transexuales, según se desprende del informe, que afirma que el 48% de este colectivo ha sufrido algún trato discriminatorio al ir al médico.

Rubén, un joven transexual que vive en Madrid, relató durante la presentación del informe en la sede madrileña de Médicos del Mundo cómo al pedir cita en Endocrinología para su tratamiento hormonal “me derivaron a psiquiatría porque necesitaba un informe que identificara mi identidad”.

Actualmente, las personas transexuales que quieren que en su DNI aparezca el nombre con el que se sienten identificados deben acreditar con un psiquiatra que hay una disonancia entre el sexo inscrito y su verdadera identidad, lo que antes se diagnosticaba como una disforia de género.

Sin embargo, para acceder a este cambio en el registro no sólo se les pide el informe psiquiátrico, sino que se les obliga a llevar dos años con tratamiento hormonal, algo a lo que no todas las personas que se identifican con otro sexo están dispuestas.

Al margen de las trabas para cambiar de nombre y obtener una tarjeta sanitaria con la que se identifiquen, las personas transexuales denuncian otras situaciones que, aunque no tengan tanto que ver con el procedimiento, son igualmente sangrantes.

Rubén ya consiguió cambiar su nombre en el registro y tiene una tarjeta sanitaria que le acredita como varón. “En la consulta me tratan como Rubén porque tengo la documentación cambiada, pero en cuanto me empiezo a desvestir ya emplean el pronombre femenino conmigo”, relató.

Además, el tener una tarjeta que le acredita como hombre no soluciona todos los trámites: “Cuando he pedido una derivación a Ginecología, al aparecer como masculino en el sistema informático la cita acaba rechazada”.

Eso ocurre, según la portavoz de Médicos del Mundo, Inmaculada Amador, porque “el sistema de salud se sigue abordando desde una perspectiva binaria y estereotipada”. Y es que “la sanidad pública no ha integrado la diversidad”, denunció.

Los responsables del informe, que se ha realizado en base a un sondeo entre 69 personas transexuales, exigen que se forme a los profesionales sanitarios para tratar a pacientes transexuales, quienes, según reflejan los datos, se estarían autoexcluyendo de uno de sus derechos básicos por el trato que reciben.

(SERVIMEDIA)
12 Jun 2019
GIC/caa