Uno de los grupos con mayor influencia negativa en la disminución de la tasa anual fue la vivienda, cuya tasa descendió más de dos puntos, situándose en el –0,3%, a causa de la bajada de los precios de la electricidad, frente a la subida del año pasado.

También destacó el transporte, que presentó una variación anual del 1,8%, casi un punto y medio inferior a la del mes pasado, debido a que los precios de los carburantes y lubricantes se incrementaron en 2018 más de lo que han subido este mes. En el IPC influyó, aunque en menor medida, la disminución de los precios del transporte aéreo de pasajeros, ocio y cultura y alimentos y bebidas no alcohólicas.

En sentido contrario, influyeron los incrementos de los precios del pescado y marisco, que bajaron en 2018, y de la carne, que se mantuvieron estables el año anterior.

Por su parte, la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuyó dos décimas, hasta el 0,7%, con lo que se sitúa una décima por debajo de la del IPC general.

En variación mensual, el IPC registró una tasa del 0,2% en mayo, ocho décimas menos que en abril.

Por comunidades autónomas, la tasa anual del IPC disminuyó en todas el pasado mes de mayo respecto a abril. Los mayores descensos se produjeron en Castilla–La Mancha, Aragón y Navarra, con bajadas de nueve, ocho y ocho décimas, respectivamente, mientras que Cantabria fue la comunidad cuya tasa anual registró el menor descenso, cinco décimas menos que el mes anterior.

Por su parte, la tasa de variación anual del IPC armonizado (IPCA) se situó en mayo en el 0,9%, siete décimas por debajo de la registrada el mes anterior. La variación mensual de este indicador fue del 0,2%.

El INE también mide el IPC a impuestos constantes, que en mayo registró una tasa anual del 0,8%, la misma que la registrada por el IPC general. Por su parte, el IPCA a impuestos constantes presentó una tasa anual del 0,9%, la misma que la del IPCA.