Los hechos sucedieron en 2010, cuando el exvicealcalde de Valencia compró un reloj de oro Lange, cuyo precio de mercado ronda los 25.000 euros. Para culminar la compra, Grau entregó más de 12.000 euros y un reloj Breguet Classique, éste valorado en más de 13.000 euros. La investigación determinó que este artículo fue comprado por la sociedad bajo sospecha, la empresa Transvia.

Y en 2012 repitió este mecanismo y en este caso adquirió un reloj Vachever Patrimony con un precio de 16.825 euros. Dejó a cuenta en la joyería otro de los relojes regalados y valorado en 11.575 euros, para completar el pago puso 5.000 euros de su bolsillo, según defendió al Fiscalía.