El Banco de España abre a las universidades la posibilidad de formar al personal que otorgue hipotecas
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Las universidades, públicas y privadas, podrán competir con empresas especializadas en la prestación de la nueva formación que será exigible cursar al personal de las entidades financieras que comercialice préstamos inmobiliarios.
Así lo establece el Banco de España en el procedimiento lanzado este viernes para que las empresas e instituciones interesadas presenten candidatura, con documentación acreditativa de sus capacidades, que el organismo evaluará a fin de elaborar un listado de títulos y certificaciones oficial.
La exigencia de formar adecuadamente al personal que otorga hipotecas se estableció en la ley de contratos de crédito inmobiliario o también conocida como reforma hipotecaria, que entrará en vigor el próximo 16 de junio, donde obliga a efectuar una evaluación “en profundidad” de la solvencia del cliente para evitar los excesos.
El Ministerio de Economía fijó los conocimientos y competencias que deben reunir quienes concedan dicha financiación, junto a las materias y formación a cursar en una orden ministerial, y mandató al organismo supervisor para determinar qué empresas son competentes para impartir los cursos y certificar sus capacidades.
El procedimiento deja claro desde el principio que “en ningún caso” podrán ejercer la actividad de formación y certificación la misma entidad o empresa, e impone a los interesados disponer de una política de conflictos de interés que asegure su independencia frente a las entidades financieras.
La exigencia de formación no se agota en la banca y será requisito necesario para cualquier persona que comercialice préstamos inmobiliarios, sean intermediarios de crédito o, incluso, representantes designados por ellos o los prestamistas.
Los interesados en figurar en dicho listado oficial, que el Banco de España divulgará en su web, tendrán que acreditar en su candidatura que poseen los medios técnicos y humanos necesarios y detallar la formación que proponen, con el correspondiente desglose de materias, horas comprendidas en el curso y procedimiento para examinar a los alumnos.
El estudio del Banco de España impone identificar además a las empresas que expedirán la certificación detallar su forma societaria y accionariado, junto a sus posibles vinculaciones “técnica, financiera, comercial o de cualquier otra índole” con organizaciones y entidades, sobre todo si son financieras o especialistas en formación para verificar su independencia.
(SERVIMEDIA)
31 Mayo 2019
ECR/caa