Bosch indicó que su plantilla, a 31 de diciembre de 2018, ascendía a 8.650 empleados, manteniendo el nivel del año anterior, y que el grupo invirtió unos 80 millones de euros en España durante 2018.

Entre los proyectos en marcha subrayó el Sotware Hub en la nueva localización de Bosch en Barcelona, donde pretende tener contratados a unos 70 ingenieros de software hasta finales de año.

En Sevilla también tiene previsto el proyecto ‘smart city’, centrado en la utilización de la analítica de video de cámaras de Bosch como sensores inteligentes, proporcionando información en tiempo real sobre la afluencia de personas, multitudes, medición virtual de aforos y detección de objetos en movimiento, así como de vehículos pesados en zonas peatonales.

En Madrid, la compañía lanzó el servicio de scooter eléctrico compartido Coup, y tras una “exitosa introducción” prevé aumentar su flota en 500 unidades más este año, alcanzando los 1.350 scooters en la ciudad.

En materia de acción climática, Bosch prevé reducir a cero su huella de dióxido de carbono en sus 400 emplazamientos en todo el mundo para 2020.

En las localizaciones españolas, las emisiones absolutas de dióxido de carbono se han reducido en un 10% en los últimos dos años, a pesar de que la capacidad en horas de trabajo se ha incrementado en más del cinco por ciento durante el mismo período. Para 2019, Bosch España planea invertir unos dos millones de euros en diferentes medidas para reducir aún más las emisiones de dióxido de carbono en sus emplazamientos.