Rivera acudió al Congreso de los Diputados a entregar su credencial como electo, al igual que horas antes habían hecho esos cuatro diputados, y expresó ante los medios de comunicación el "honor" y el "orgullo" que siente al representar con 57 diputados a 4,2 millones de votantes. "Vamos a ser su voz", dijo, liderando una oposición "firme" al Gobierno pero con "mano tendida" en asuntos de Estado en los que Ciudadanos tendrá puesta "la camiseta de España".

Uno de los ámbitos en los que Ciudadanos vigilará con más empeño al Gobierno será en la garantía de que no hay "concesiones" a los independentistas, y en ese sentido anunció que nada más constituirse el Congreso de los Diputados pedirá la suspensión de esos diputados que "han intentado dar un golpe de Estado".

Considera que personas procesadas por delitos contra la soberanía nacional no pueden ocupar un escaño en la Cámara que representa esa soberanía nacional, porque sería "una vergüenza", y pidió por ello a quienes formen parte de esa Mesa que decidan con "celeridad absoluta".