Esta organización ha puesto en conocimiento de la Comisión Nacional de Competencia (CNC) la presunta fijación de precios que pudiera estar dándose en 34 productos de amplio consumo, tras el estudio realizado sobre 180 productos.

La OCU ha recogido precios de 180 productos (representados por más de 400 modelos en total) en 16 gamas de productos de gran consumo, como son los televisores, reproductores y películas de DVD, videocámaras, cámaras de fotos, móviles, lectores MP3, navegadores GPS, videoconsolas y videojuegos, aspiradores, planchas, lavavajillas, perfumes, relojes y productos de supermercado, y ha comprobado que en 34 casos el precio es casi idéntico en la gran mayoría de establecimientos.

La OCU considera que determinadas marcas están consiguiendo imponer a los distribuidores de sus productos un mismo precio, limitando seriamente la posibilidad de competencia entre ellos y causando un importante perjuicio al consumidor.

En concreto, la OCU ha detectado estas prácticas restrictivas de la competencia en el 19% de los productos seleccionados. Estos productos suelen corresponder con marcas con una fuerte posición o incluso dominante en el mercado.

La OCU entiende que estas prácticas, censurables en una economía libre de mercado por cuanto impiden el ajuste de la oferta y la demanda y mantienen precios altos de manera artificial, son realizadas por el poder de mercado que ostentan ciertas marcas que les permite dejar de suministrar sus productos al comercio que no cumpla con el precio de venta recomendado.

La OCU ha puesto estos hechos en conocimiento de la CNC y de la Comisión Europea para que investiguen, y en su caso sancionen, si existen prácticas de fijación de precios en estos 34 productos de amplio consumo.