Según informó este viernes la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el individuo fue interceptado tras escalar varios muros y fue sorprendido en el interior de una vivienda escondido en la bañera portando un arma larga.

Tras registrarle, los agentes le intervinieron diversos útiles para abrir cerraduras, unos 1.000 euros, un rifle de grandes dimensiones y monedas británicas, albanesas y dólares americanos.

Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 17 de abril, cuando un vecino de la zona requirió presencia policial dado que estaba escuchando ruidos metálicos en un domicilio del que tenía constancia que no se encontraban sus moradores en él. Para seguir el rastro del detenido, los agentes tuvieron que ir saltando los muros que separaban varias terrazas, dado que en varios pisos encontraron marcas de erosión recientes efectuadas por herramientas en zonas de acceso a las viviendas, lo cual permitió a los agentes inferir que era probable que la persona se encontrara dentro de uno de estos inmuebles.

Una vez los agentes accedieron a uno de estos pisos de donde procedían los ruidos metálicos, descubrieron a este hombre agazapado y a oscuras en la bañera tratando de ocultarse ante la presencia policial. A su lado tenía un rifle del calibre 30, circunstancia que hizo que los agentes extremaran las medidas de seguridad para lograr su detención.