Con esta promesa, el PP quiere que “ninguna mujer deje de ser madre por su situación económica, social o familiar”, aunque en ningún caso habla de la actual ley del aborto ni de modificarla. En sentido propositivo, el PP se centra en explicar sus propuestas para mejorar la natalidad.

Tras presentar a la familia como “el eje de la sociedad”, el partido liderado por Pablo Casado promete fomentar “la cultura de la vida” y la maternidad, posicionándose “del lado de las mujeres y evitando dejar solas a las que reclaman asistencia de las instituciones”.

Esto se concreta, en primer lugar, en la creación de la Conferencia Sectorial de la Familia, entre Administración General del Estado, comunidades autónomas y entidades locales para el seguimiento y promoción de las políticas de familia.

De llegar al Gobierno, Casado impulsará una ley de apoyo a la maternidad que contemple un conjunto de medidas para poner en valor la maternidad, amplíe las medidas de conciliación y corresponsabilidad, impulse medidas fiscales en favor de las familias y la promoción de la orientación familiar.

Además, el PP asegura que pondrá en marcha “un Portal de Apoyo a la Natalidad” que unifique todos los recursos existentes para la protección social de la maternidad y que difunda información sobre “el valor social de la maternidad”, la corresponsabilidad de los padres y buenas prácticas empresariales de flexibilidad laboral.

También se comprometen los populares a aprobar incentivos fiscales para las empresas que contraten mujeres después de la maternidad y prometen mejorar la protección social y las ayudas a jóvenes embarazadas y familias jóvenes.

Concretamente, en el programa del PP se habla de ayudas a la formación y continuación de los estudios de jóvenes embarazadas, para adaptar, si fuera necesario y de manera temporal, su periodo de escolarización “de manera que la maternidad no suponga un obstáculo”.

Igualmente, el PP quiere “mejorar el reconocimiento a las familias monoparentales” para que se asegure y amplíe su protección.