Fuentes de la dirección nacional indicaron a Servimedia que Rajoy está "muy satisfecho" por los 18 escaños conseguidos en Cataluña, que suponen "el mejor resultado en la historia" del partido. Hasta ahora, el mayor éxito lo había logrado Alejo Vidal-Quadras con 17 diputados, pero Alicia Sánchez Camacho ha dejado pequeña esa cifra.

Rajoy valora especialmente el resultado de este domingo porque se produce "en las circunstancias más adversas", ya que entiende que lo habitual en unos comicios autonómicos catalanes es que el votante de derechas prefiera a CiU antes que al PP. Ahora, en cambio, CiU ha subido hasta rozar la mayoría absoluta pero los populares también crecen, incluso con casi 70.000 votos más que en las elecciones de hace cuatro años.

En clave interna, el PP analiza lo ocurrido en Cataluña como una prueba de que la estrategia que Mariano Rajoy marcó en el XVI Congreso Nacional, celebrado en Valencia en junio de 2008, ha sido un acierto. Desde entonces, ha ganado en Galicia, se ha convertido en una fuerza decisiva en el País Vasco, venció en las europeas de 2009 y ha subido de forma espectacular en las catalanas.

Los colaboradores de Rajoy creen que el líder de la oposición "más pronto que tarde va a tener que gobernar España" porque lo ocurrido en Cataluña es la antesala del cambio político en el conjunto del país y, especialmente, porque el socialista José Luis Rodríguez Zapatero "está hoy más debilitado políticamente que hace una semana".

El PP cree que el resultado de las elecciones autonómicas catalanas deja a Mariano Rajoy "en vísperas del cambio nacional" y, por lo tanto, a las puertas de La Moncloa gracias a la fuerte caída del Partido Socialista y al incremento en votos y escaños que han obtenido los conservadores.