Manos Unidas recauda fondos para mandar ayudas a los afectados por el ciclón Idai

MADRID
SERVIMEDIA

La ONG Manos Unidas ha abierto este miércoles una cuenta de emergencia específica para recaudar fondos con el objetivo de enviar ayuda a los tres países más afectados por el paso del ciclón Idai: Mozambique, Malawi y Zimbabwe.

En Mozambique, los muertos podrían superar el millar, según fuentes oficiales, y los daños, en estos momentos, son “incalculables”. “Las lluvias no cesan de caer y con ellas aumenta el número de edificios e infraestructuras destruidos”, explica la organización en un comunicado.

En Malawi y Zimbabwe, donde Idai llegó transformado ya en tormenta, las inundaciones han causado, también, decenas de muertos y daños también muy considerables.

“En Manos Unidas hemos recibido con gran preocupación y tristeza las noticias provenientes de unos países en los que llevamos trabajando décadas. Malawi, Mozambique y Zimbabwe están entre las naciones más pobres del mundo y para nosotros es prioritaria la cooperación con ellos”, asegura la coordinadora de proyectos de Manos Unidas en África Austral, Beatriz Hernáez.

En estos momentos, la ONG afirma que está en contacto con los socios locales, la mayoría de ellos congregaciones religiosas, que, con “grandes dificultades” por los daños en las infraestructuras de comunicación, están informando de la situación.

“Las edificaciones que han aguantado se han convertido en refugio de cientos de familias que han perdido todo. En las calles de la ciudad todo es un caos, no hay farolas, los árboles bloquean las calles y las tiendas y mercados están cerrado”, relata Beatriz Hernaez, haciéndose eco de los mensajes recibidos estos días.

“En cuanto se pueda hacer una primera evaluación de los daños, pondremos en marcha las acciones de emergencia que se van a destinar tanto a socorrer a la población damnificada con ayuda de primera necesidad, como a la posterior reconstrucción de lo destruido por el viento y las aguas. Cualquier ayuda que nos llegue para atender a estas personas, que lo han perdido absolutamente todo, será bienvenida. Porque las pérdidas no son solo a corto plazo, sin cosechas, el año que viene estas familias tendrán graves dificultades para encontrar un sustento, en países en los que ya se dan con frecuencia emergencias alimentarias. Además, con las inundaciones y el agua estancada aparecerán, casi con total seguridad, brotes de malaria y enfermedades gastrointestinales e infecciosas, como el cólera”, explica la coordinadora.

(SERVIMEDIA)
20 Mar 2019
ARS/gja