El Gobierno cree que el mercado laboral español necesitará "un complemento migratorio"
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La secretaria de Estado de Migraciones del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Consuelo Rumí, aseguró este miércoles que el mercado laboral español "va a necesitar un complemento migratorio, una entrada de perfiles laborales que no se podrán cubrir con personas que ya están aquí".
En el seminario 'Migración y Ciudades: El camino hacia una integración inclusiva' celebrado en la sede de Fundación Telefónica, Rumí defendió la utilización de "instrumentos legales que propician el encuentro entre oferta y demanda laboral", entre los que destacó la puesta en marcha de los visados para la búsqueda de empleo dirigidos a hijos y nietos de españoles residentes en Argentina, que se podrán solicitar a partir del 1 de abril.
Asimismo, se refirió a la gestión colectiva de contratación estable en origen, la migración circular (temporal) y la mejora del empleo cualificado. Además, se refirió a la necesidad de disponer de "una estrategia de integración basada en los principios de igualdad y no discriminación, ciudadanía, inclusión e interculturalidad".
“En España estamos poniendo en marcha una política de integración que descansa en dos pilares: el reconocimiento de la inmigración como una realidad positiva para el país y una apuesta por el desarrollo de un marco de concertación y cooperación entre los distintos actores”, subrayó Rumí.
A su juicio, "las migraciones han sido, son y serán una constante a lo largo de la historia, por lo que “las personas seguirán desplazándose, ya sea de manera regular o irregular". La inmigración “ha llegado para quedarse", prosiguió, y "la creciente diversidad cultural no es un fenómeno coyuntural o excepcional, sino una de las claves estructurales que van a definir las sociedades futuras". Por eso, "los gobiernos “no deben centrar los esfuerzos en tratar de detener la migración, sino en crear las condiciones en las que migrar sea una elección y no una necesidad".
Rumí admitió que “el incremento de llegadas a España en 2018 fue un reto a corto plazo", porque había que "garantizar los derechos humanos de estas personas”, y destacó que frente a otros Estados miembros de la Unión Europea “que defienden una visión exclusivamente securitaria, España defiende una visión integral de la inmigración”. Finalmente, reclamó a la UE la adopción de políticas y medidas que permitan "una migración segura, ordenada y regular, además de reforzar la inclusión y la cohesión social”.
(SERVIMEDIA)
20 Mar 2019
AGQ/gja