En su segundo turno en la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados, para hablar de la posición de España ante la crisis de Venezuela, el Brexit y las sociedades instrumentales de algunos ministros , Bustinduy recriminó al PP y Ciudadanos que “no se puede decir cualquier cosa” en sede parlamentaria, y en concreto criticó que “es oportunista” e “irresponsable” utilizar cualquier conflicto para servir a sus propios intereses a corto plazo.

Sobre el conflicto nacionalista catalán, Bustinduy conjeturó que “si hubiera una posibilidad de solución democrática, no la aceptarían” estos partidos, a quienes pidió: “No bajen el nivel, no mientan”, y preguntó al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, que le había acusado de despreciar al empresario que “se la juega”, si la banca se la juega y es lícito que no devuelva el dinero del rescate, como había propuesto él.

Respecto a Venezuela insistió en preguntar si el Gobierno va a apoyar una guerra civil o un golpe militar, pues tal es la hoja de ruta de EEUU; reprochó a Sánchez haber “despachado en 30 segundos” su réplica mientras se explayaba ante otros interlocutores a quienes criticaba por haberse desviado de los temas, y terminó emplazando al PSOE en general a que aclare “en qué dirección de país” quiere ir porque “no se puede caminar en dos direcciones opuestas a la vez”: la de pactar con Podemos o “flirtear” con hacerlo con Ciudadanos.