OCU advierte de que las anchoas en conserva pueden denominarse “del Cantábrico” aunque no procedan de él

-Ve “confusa” la normativa actual

Madrid
SERVIMEDIA

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advirtió este miércoles de que es posible encontrar en el mercado latas de filetes de anchoa cuya materia prima se denomina “del Cantábrico” pero que pueden haber sido capturadas en otros mares u océanos dado que, a pesar de que las anchoas estas son “muy valoradas y reconocidas”, esta conserva no cuenta con una indicación geográfica protegida.

Según indicó OCU, para que una conserva de filetes de anchoa sea comercializada bajo la denominación “del Cantábrico” el único requisito obligatorio es que esta corresponda a la especie Engraulis encrasicolus.

En la actualidad, ni siquiera es obligatorio especificar el nombre de la especie concreta de la anchoa en el etiquetado, por lo que, a juicio de la organización, los consumidores tienen “difícil” comprobar qué producto están comprando, e incluso “corren el riesgo” de pagar un precio muy alto por una anchoa de calidad inferior.

Tras analizar 15 latas de anchoas de diferentes marcas comercializadas bajo la etiqueta “del Cantábrico”, OCU comprobó que todas, incluso las que no lo especificaban en el etiquetado, eran de la especie Engraulis encrasicolus, por lo que todas cumplen con la normativa vigente. Cuatro de ellas no lo indicaban en la etiqueta y 11 no especificaban su origen.

SELLOS DE CALIDAD

Cantabria y País Vasco han creado sellos de calidad más exigentes, tanto con las zonas de pesca como con el lugar de elaboración de la conserva.

En el caso de la procedente del País Vasco, para llevar este sello no solo se exige que la anchoa sea Engraulis encrasicolus, sino que debe haber sido capturada en la zona habitual de pesca de la flota artesanal vasca de bajura y las conservas, elaboradas en el País Vasco.

Por su parte, el sello de Calidad Controlada de Cantabria, que es voluntario, también exige que sea Engraulis encrasicolus y que todo el proceso de escaldado, corte, escurrido, fileteado, aceitado y cierre del envase sea realizado en una conservera ubicada en Cantabria. En este caso, la zona de captura es más amplia, abarcando el Atlántico Noreste, el Mar Mediterráneo y el Atlántico Centro-Este.

OCU consideró que, al igual que ocurre con las anchoas frescas, en la que es obligatorio especificar su procedencia, también las conservas de este pescado deberían estar obligadas a ello para atajar la situación de “desconocimiento y confusión” ante este producto.

Esta petición se enmarca en la campaña #EatOriginal, a través de la que OCU, junto con otras organizaciones europeas, exige a la Comisión Europea que se informe claramente acerca del lugar de origen de los alimentos y que esta aparezca en el etiquetado, independientemente de que sean frescos o procesados.

Además, se inserta en la iniciativa #Nocuela, una propuesta con la que OCU quiere desmentir y aclarar cualquier tipo de información o rumor falso en materia de consumo.

(SERVIMEDIA)
20 Feb 2019
MJR/gja