Calviño realizó esta valoración durante su intervención en la jornada 'Cerrar la brecha de género: ¿Qué hay en la agenda del CEO?', organizada por AT Kearney, donde subrayó la preocupación del Gobierno por combatir esta situación.

La ministra indicó que es un problema que debe abordarse desde distintos ángulos y con medidas diferentes por una razón de "eficiencia económica y eficiencia social" tanto desde el ámbito público como desde el sector privado y lamentó que la crisis ha ido en contra de esta necesidad aumentando los desequilibrios como retrasando el camino hacia la equidad.

Durante el mismo encuentro, María Eugenia Fanjul, socia de AT Kearney, enumeró varios estudios que constatan que los equipos diversos "son muchísimos más productivos y tienen mejores resultados".

Con más directivas se obtienen "mejores rentabilidades" y soluciones "más innovadoras", explicó Fanjul, antes de exponer que un estudio del World Economic Forum estima en 200 años los que necesitaría el país para cerrar la brecha de género, después de colocar a España en el puesto 30 entre 150 países por este parámetro y el 80 cuando la comparativa se centra en el poder económico de las mujeres.

"Eso es muy preocupante, en primer lugar por razones de justicia" pero también por un problema de equidad, respondió Calviño sobre las conclusiones de dicho informe, defendiendo que además "no tiene sentido desde el punto de vista económico" está "ampliamente documentado que la diversidad da beneficios para las organizaciones y para el conjunto de la sociedad".

"No podemos permitirnos prescindir del talento de la mitad de la población", insistió antes de detallar que el Gobierno tienen tan claro esto que es "feminista" hasta el punto de que casi todas las carteras económicas las dirigen mujeres y por eso está regulando para cambiar la situación.

La ministra reconoció que "combatir la discriminación no es algo que se arregla con una barita mágica o con medidas concretas", por lo que se deben articular actuaciones en distintos ámbitos.

Entre las ya adoptadas indicó la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), ya que la mujer sufre una de las tasas de temporalidad y parcialidad en la contratación de las más elevadas, con una brecha salarial un 20% inferior a los hombres y ocupando además casi el 70% de los empleos con salarios mínimos.

Otras medidas adoptadas para favorecer la carrera profesional que indicó es la equiparación de las bajas de paternidad y maternidad, y detalló que hay que trabajar en otros aspectos como la formación, ya que las mujeres ocupan también muchos de los puestos llamados en el futuro a automatizarse.

Entre las medidas en desarrollo anunció que en breve el Gobierno presentará la Agenda del Cambio, un programa con iniciativas en múltiples aspectos que involucra a diferentes ministerios, y mencionó la proposición de ley para garantizar la igualdad en trámite en el Congreso.

Bajo este último programa, el Ejecutivo promueve actuaciones como ofrecer beneficios fiscales en el impuesto de sociedades a compañías por la incorporación de mujeres a sus consejos de administración.