Identifican las proteínas que componen el virus de la peste porcina africana

MADRID
SERVIMEDIA

Investigadores del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa -centro mixto de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)- han descrito las 90 proteínas que componen el virus de la peste porcina africana en un estudio publicado recientemente en el ‘Journal of Virology’.

El trabajo proporciona un atlas que describe “las posibles funciones de estos componentes en el ensamblaje de la partícula viral, la expresión de los genes virales y la entrada del virus en la célula huésped”, según explican los responsables en un comunicado.

Para determinar la composición del virus, los autores obtuvieron preparaciones “muy puras de partículas virales”, que sometieron posteriormente a un análisis por espectrometría de masas, una técnica de identificación de proteínas de gran sensibilidad.

De este modo, determinaron la composición de la partícula infectiva, es decir, el repertorio completo de proteínas que lo componen. Así, detectaron 90 tipos distintos de proteínas, 70 de origen viral (codificadas por el propio ADN viral) y 20 proteínas celulares, que la partícula viral incorpora durante su formación y salida de la célula huésped.

"Hemos querido ir más allá de la mera descripción de la composición del virus y elaborar un auténtico atlas funcional de la partícula infecciosa”, explica el investigador del centro y director de la investigación, el doctor Germán Andrés. Para ello, los autores utilizaron además técnicas de microscopía electrónica y análisis bioinformático, con las que lograron asignar localizaciones específicas y categorías funcionales a muchas de las proteínas detectadas.

La peste porcina africana es una grave enfermedad infectocontagiosa que afecta al cerdo doméstico, provocando elevadas tasas de mortalidad en las áreas afectadas. El agente causante, el virus de la peste porcina africana, es capaz de infectar tanto cerdos domésticos como jabalíes, propagándose con facilidad por contacto directo entre ellos o a través de ciertas especies de garrapatas, que transmiten la enfermedad a través de la picadura.

Después de una larga ausencia del continente europeo, la enfermedad reapareció en 2007 con un brote epidémico en la región caucásica. Desde entonces, la enfermedad se ha propagado rápidamente por diversos países asiáticos y europeos, afectando en la actualidad a nueve países de la Unión Europea y, desde agosto de 2018, a China, primer productor mundial de ganado porcino, contextualizan los expertos en el comunicado.

(SERVIMEDIA)
28 Ene 2019
ARS/gja