Según informó Adif, este Plan Director, elaborado conjuntamente con Renfe, da respuesta al Acuerdo Marco para la Lucha contra el Cambio Climático suscrito por Adif y Adif Alta Velocidad con dicha entidad en marzo del año pasado. En este Acuerdo Marco se contempla la posibilidad de que otros agentes del sistema ferroviario se unan a los objetivos del mismo, de manera que se pueda producir una mayor colaboración de todos los actores dentro del sector.

Se estima que las distintas medidas incluidas en esta iniciativa permitirán un ahorro económico de 251 millones hasta 2030.

El Plan busca disminuir las emisiones en el conjunto del transporte nacional mediante la captación de tráficos por el desarrollo y mejora de la red ferroviaria. En concreto, la reducción de emisiones acumuladas hasta 2030 por el cambio modal se estima en más de ocho millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2).

Se incluye la implantación de una red inteligente de energía en la red ferroviaria de alta velocidad; la eficiencia en vehículos ferroviarios y eficiencia en estaciones, talleres y edificios técnicos y de oficinas, y la devolución de energía por frenado regenerativo en las subestaciones eléctricas de la red convencional.

Asimismo, el Plan contiene una serie de medidas de eficiencia energética y descarbonización aplicadas al sistema ferroviario en su conjunto y enfocadas a conseguir una reducción acumulada del consumo energético en unos 5.300 gigavatios por hora hasta 2030. Por ejemplo, la electrificación de diversas líneas (como, por ejemplo, Salamanca-Fuente de Oñoro, Bobadilla-Algeciras, Zaragoza-Teruel-Sagunto y Guillareui-Tui-Frontera Portuguesa).

Estas medidas supondrán igualmente una reducción de emisiones acumuladas de un millón y medio de toneladas de CO2 en el mismo período.

El Plan contempla entre sus actuaciones la compra de energía eléctrica verde, lo que permitirá la reducción de emisiones acumuladas en más de siete millones de toneladas de CO2 de aquí a 2030.