Fuentes de este círculo consultadas por Servimedia se mostraron inquietas tras las palabras que transmitió en la segunda jornada del cónclave popular el que fuera presidente del partido entre 1989 y 2004. Rajoy, resaltan, fue “elegante” la víspera aunque su perfil fuese “más bajo”.

Aunque muchos se deshicieron en elogios tras escuchar al “animal político” que es Aznar y aplaudieron su llamada a “abrir la casa” del PP, otros criticaron que pidiese directamente el voto para el partido después de sus duras críticas en los últimos años a la acción del Gobierno popular.

Algunos dirigentes llegaron a cuestionar que esta fórmula sea “adecuada” y reconocieron que ha generado malestar en algunas filas populares. “Aznar es Aznar”, se resignaron a decir tras una jornada eclipsada por la presencia del presidente de FAES.

En su intervención en la Convención del “rearme ideológico”, Aznar proclamó que “el PP es el seguro de cambio” y defendió que Casado es “un líder como un castillo”. “No quiero dejar nada a la interpretación. Los votos que España necesita para responder contra este desafío son los votos que deben ir al PP y que desde ahora pido para el PP”, sentenció Aznar.

Lo hizo a más de cuatro meses para las elecciones europeas, municipales, autonómicas del 26 de mayo y sin que haya previsión para la celebración de las próximas elecciones generales, que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pretende retrasar hasta 2020.

Esta forma de manifestarse fue justo la que generó resquemores en determinados círculos populares más identificados con el PP que lideraba Rajoy. “Podría haberlo dicho de otra manera”, consideraron. "No fue capaz de hacer lo mismo con Rajoy en los últimos años", lamentaban. “Pero Aznar es Aznar”, se resignaron conocedores de que en la dirección de Pablo Casado aplauden las palabras del expresidente.

Los sectores más críticos dicen a Servimedia que “ya lo dice todo” el hecho de que Aznar tenga que explicar que su voto para el PP. Advierten de que un discurso como el del presidente de FAES puede “alejar” a parte del electorado que hasta ahora se ha sentido cómodo con un PP “moderado”.

Para que el ‘nuevo PP’ llegue al Gobierno, insisten las mencionadas fuentes, debe abrirse a la mayor cantidad de personas y no disgustar con sus mensajes a posibles votantes, algo que creen que pasará si se sigue la doctrina del “PP más duro” de Aznar.