Estos datos proceden de censos nacionales elaborados por SEO/BirdLife y dados a conocer este viernes. El sisón común se concentra principalmente en Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, Comunidad de Madrid, Murcia y Comunidad Valenciana, con la mayor población reproductora en la región castellanomanchega, ya que acoge a aproximadamente el 65% de la población estatal, pero es una de las comunidades donde más ha disminuido.

El declive del sisón es consecuencia de la transformación de pastizales y cultivos herbáceos de secano extensivos en sistemas agrarios intensivos, proceso que ha tenido lugar en Europa occidental desde mediados del siglo XX y que continúa en la actualidad. Determinadas prácticas de la agricultura intensiva han traído consigo una gran pérdida de hábitat, tanto en cantidad (desaparición de herbazales naturales, transformación a regadío, o sustitución de cultivos cerealistas por leñosos), como en calidad (homogenización de la cobertura vegetal, eliminación de plantas y artrópodos por la aplicación de pesticidas).

La reducción del alimento, en especial de los artrópodos, parece haber impactado muy negativamente en la supervivencia de los ejemplares más jóvenes de sisón. Algunas prácticas agrícolas intensivas ha reducido, además, la adecuación del hábitat sisonero para la nidificación y el uso de máquinas cosechadoras modernas es una causa importante de pérdida de nidos y de mortalidad para hembras y pollos, especialmente durante la recogida nocturna de la cosecha.

¿DÓNDE SE ENCUENTRA?

Según SEO/BirdLife, el 87% de la población de sisón común en la Península Ibérica se concentra en las estepas cerealistas de la mitad sur (Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, Comunidad de Madrid, Región de Murcia y Comunidad Valenciana), La población de la mitad norte (meseta norte y valle del Ebro) es significativamente inferior, con la mayor parte de ejemplares en Aragón y Cataluña, por delante de las provincias de Zamora y León.

La estima media de la población total de machos reproductores en España ha pasado de 74.084 en 2005 a 38.856 individuos en 2016. En este último año quedaban sólo el 52% de los machos de sisón que existían en 2005, lo que supone un descenso del 48% en 11 años. En el conjunto de las 34 provincias estudiadas, la tendencia mediana ha sido de un descenso del 60% en el número de machos.

Las tendencias descritas para el periodo 2005-2016, superiores al transcurso de tres generaciones de la especie la población española, el sisón debe ser recatalogada como 'en peligro', es decir, debe dejar de ser considerada como especie 'vulnerable'.