Deuda Pública
El Tesoro espera que la evolución de 2019 permita reducir la emisión neta de deuda por debajo de los 35.000 millones anunciados
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El Tesoro Público, organismo dependiente del Ministerio de Economía y Empresa, espera que la evolución de las necesidades de financiación a lo largo de 2019 permita que en la segunda mitad del ejercicio pueda anunciarse una reducción de la emisión neta de deuda para que sea menor de los 35.000 millones de euros previstos inicialmente.
Así lo señaló en la rueda de prensa de presentación de la estrategia del Tesoro para 2019 el secretario general del Tesoro Público y Financiación Internacional, Carlos San Basilio, quien aseguró que la previsión inicial de 35.000 millones, 5.000 millones menor a la prevista en un principio en 2018, es una “estimación prudente y conservadora”.
“La idea sería que en la segunda mitad del año pudiéramos, como en 2018, una vez comprobada la evolución de las variables que determinan la necesidad de financiación, anunciar una reducción de emisiones reales en términos netos”, añadió.
En 2018 el Tesoro proyectó inicialmente una emisión neta de 40.000 millones de euros, aunque finalmente ésta se cerró en algo más de 34.200 millones. En este sentido, San Basilio indicó que el objetivo del Tesoro para 2019 es continuar reduciendo la emisión ante un menor déficit de caja y una menor financiación del Estado a comunidades autónomas y entidades locales debido a que éstas continúen en la línea de recuperar su autonomía financiera.
Así, el Tesoro espera obtener toda la financiación neta a través de instrumentos a medio y largo plazo, mientras que la emisión bruta a medio y largo plazo ascenderá a 126.933 millones, un 3,8% inferior a la de 2018. En cuanto a las Letras, su emisión será nula, por lo que su emisión bruta será equivalente a los vencimientos, que ascenderán a 82.592 millones. En términos agregados, la emisión bruta será de 209.526 millones, un 1,6% inferior a la de 2018.
Por otro lado, San Basilio señaló que no es previsible que se mantenga el ritmo de crecimiento de la vida media de la deuda en circulación experimentado en los últimos años, pero sí que continúe bajando su coste medio, a pesar del aumento previsto en los tipos de interés. En este sentido, consideró que los actuales niveles de los tipos de interés son “de ciencia ficción” y que el objetivo es continuar “beneficiándonos de unos costes en mínimos históricos”.
Además, afirmó que tanto la vida media como el perfil de los tenedores de la deuda española son similares a los de los países del entorno europeo. Sobre este punto, indicó que existe un cambio en el perfil de los tenedores de la deuda, aumentando el peso de los no residentes, pero que la situación es “muy equilibrada y en línea con las mejores prácticas del entorno europeo”.
En cuanto al ratio de deuda sobre PIB, San Basilio aseguró que continuará la aceleración en su reducción, destacando el “compromiso” para ello y cerrar 2019 en el objetivo del 95,4%. “Cuanto más podamos reducir mayor será la capacidad de reducir los costes de financiación”, añadió sobre este punto.
En la misma línea, aseguró que la paulatina retirada del Banco Central Europeo como inversor se ve sustituida, gracias a la mejora de la calificación de la deuda española y al buen funcionamiento de las principales variables económicas, como el crecimiento del PIB o la creación de empleo, por una nueva base de inversores. Por ello, dijo que “independientemente de la actuación del BCE creemos que se va a seguir reduciendo el coste medio” de la deuda. “El inversor está preocupado por el mantenimiento del crecimiento en España y la consolidación presupuestaria y la corrección de desequilibrios como el desempleo y la deuda pública”, agregó.
(SERVIMEDIA)
15 Ene 2019
IPS/caa