“No debería recurrir a ese esencialismo”, dijo Ábalos en una entrevista en Onda Cero recogida por Servimedia, en la que comentó que “dentro de ese desafío que tiene (el Partido Popular), hay que procurar que no caiga en tal nivel de desesperación que haga peligrar las conquistas democráticas en este país”.

El ministro trasladó que el Partido Popular todavía tiene que aclarar “qué principios comparte con Vox”, como llegó a afirmar durante la campaña electoral andaluza, máxime después del documento que presentó la formación que lidera Santiago Abascal.

En este sentido, Ábalos ve que “algunos tratan de imponernos una idea de España y, lo que es peor, que si no la compartimos parece que no somos españoles de verdad”. “Vox es un partido nostálgico que no se enfrentará jamás al franquismo”, remachó.

Asimismo, añadió que “Ciudadanos tiene muchas ganas de comprarle algo a Vox, y Vox se deja querer”, porque, con el documento presentado, le está diciendo: “Yo soy yo, si me quieres acéptame como soy”.

POCO SENTIDO DE ESTADO

Por otra parte, el ‘número tres’ del PSOE afirmó que el Partido Popular se encuentra en un momento en el que “da igual lo que le plantees”, que votará “en contra”, lo cual consideró es “algo inconcebible”. “Incluso si les plantemos darles una medalla nos votan en contra también”, ironizó.

A su juicio, “el no por el no, bloquear por bloquear” tiene “poco sentido de Estado” y eso está provocando que algunos líderes territoriales populares como el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, estén “asomando un poco la patita”, ya que “tiene más sentido de Estado y de partido”.

Por otra parte, Ábalos reconoció que también existe una “extrema izquierda” pero “con diferentes matices y expresiones, también territorialmente”, y en ella enmarcó al sector anticapitalista de Podemos. Sin embargo, no incluyó a la formación que lidera Pablo Iglesias, porque hizo distinción entre “el Podemos de la irrupción” en el Congreso con “el de ahora”, porque es una fuerza que ha ido “madurando y sabe cuáles son los márgenes”.

Hasta el punto de que, dijo, ahora se ve en la “escenificación” de los debates en el Congreso, donde los “exabruptos” provienen de la bancada del Partido Popular y de las formaciones independentistas.