García consideró que el consejero debería “llamar la atención” a Utrilla para decirle que “los directivos no pueden hacer este tipo de cacicadas”. A su juicio, la sanidad madrileña es “una agencia de colocación de amiguetes y de gente del partido sin carrera de gestión sanitaria”.

Tras calificar de “cacicada” esta decisión, consideró que “nuestro sistema sanitario se rige por un sistema feudal en el que directivos, gerentes y mandos intermedios son elegidos a dedo por una carrera de obediencias y no de competencias”.

Asimismo, lamentó que Utrilla, “elegido a dedo, tiene capacidad de cesar a todo un Comité de Docencia que ha sido elegido de manera más plural y democrática”. En su opinión, este es uno de los “cánceres del sistema sanitario, en el que la profesionalidad no ha llegado a los directivos”.

Por ello, pidió medidas para que la sanidad deje de ser “una red clientelar”, con el objetivo de que “suba la profesionalidad y baje la mediocridad”.