La banca arrastra 73.870 millones en morosos, la cuantía más baja desde 2009

MADRID
SERVIMEDIA

Las entidades financieras arrastran en balances a finales de octubre 73.870 millones de euros en créditos dudosos pese al frenazo de los impagos con la reactivación económica y la venta de carteras, si bien la cuantía es la más baja desde que en enero de 2009 contabilizaron 72.403 millones.

La diferencia es que la losa actual suponía en octubre un 6,084% del crédito vivo, frente al 3,88% que representaba en aquel momento porque el volumen financiado no ha dejado de caer desde que estalló la crisis, haciendo que la misma cuantía pese más en la cartera.

Los datos proceden de las estadísticas divulgadas hoy por el Banco de España, que revelan que el problema continúa, sin embargo, achicándose. La tasa de dudosos ha descendido al 6,084%, frente al 6,175% de septiembre y alejado del 8,221% que representaba en octubre del pasado ejercicio.

Es preciso remontarse casi ocho años atrás para encontrar una tasa inferior, en enero de 2011, cuando se estableció en el 6,031%.

El estallido de la burbuja inmobiliaria provocó una sangría incontenible de impagos por la quiebra de empresas primero, y el creciente desempleo.

La tasa de créditos dudoso marcó mínimo histórico en el 0,719% en diciembre de 2006, y empezó a subir a partir de entonces, aunque el avance vertiginoso tendría lugar a partir de 2009, llevando el indicador a marcar su récord en diciembre de 2013.

En este momento la tasa subió al 13,618%, incluso sin recoger por completo el valor de los activos dañados (impagos en créditos e inmuebles adjudicados), ya que un año antes se había evacuado una parte considerable del problema al banco malo o Sareb.

Habrá que esperar hasta 2016 o 2017 para que el ratio comience a descender con decisión, hasta la cota alcanzada el pasado octubre y que supone menos de la mitad del pico del problema.

No obstante, la mejora no refleja con claridad la evolución porque cae pero también lo hace el stock financiado sobre el que se calcula.

Así, en octubre la cuantia morosa desciende un 28,24% en términos interanuales, mientras que la financiación viva lo hace en un 3,036% y se sitúa en 1,21 billones.

Una de las cifras más significativas lo ofrece la evolución en lo que va de año: los 73.870 millones aún atascados en balances a finales de octubre suponen 23.822 millones menos o un 24,38% que al cierre del pasado ejercicio.

Tras la mejora se encuentra que apenas entran ya impagos nuevos, los esfuerzos de recobro y recuperación de crédito desplegados por las entidades con clientes y, sobre todo, su afán por desprenderse de carteras que nada aportan y cuestan dinero mantenerlas por los gastos de gestión y provisiones.

(SERVIMEDIA)
21 Dic 2018
ECR/caa