En su discurso en el acto de la conmemoración de la Constitución en el Congreso de los Diputados, el Monarca subrayó que estos avances en derechos civiles y en aras a la igualdad se han regido por la Carta Magna.

“Son conquistas indiscutibles en una sociedad avanzada y madura como la nuestra”, sostuvo, antes de valorar que “ningún ámbito social, económico o cultural ha quedado excluido de una renovación y mejora profunda en sus estructuras, en su organización y en su desarrollo”.

Se congratuló del Estado del bienestar que se ha ido construyendo “año a año y gracias al trabajo sacrificado y esforzado de sucesivas generaciones”. Esto es algo, remarcó el Rey, que “debemos preservar y mejorar y que es esencial en nuestra convivencia”.

“La educación pública ha llegado a todos los ciudadanos y la sanidad pública, gratuita y universal, es altamente reconocida y valorada dentro y fuera de nuestro país”, valoró, al tiempo que reconoció los “niveles de prosperidad” alcanzados en España a pesar del “impacto de la crisis económica”.

En este punto, se solidarizó con las víctimas del “fanatismo y la sinrazón terrorista” y prometió que “ellos estarán siempre, con la mayor dignidad, en nuestra memoria”. A pesar de estos “hechos muy graves y muy serios”, el Rey recalcó que la Constitución y el Estado social y democrático de derecho han prevalecido.

Finalmente, Felipe VI señaló que España ha vivido en estos 40 años “el cambio político, territorial, internacional, económico y social más profundo y más radical de su historia” y llamó a “resolver los desencuentros mediante el diálogo, respetar las leyes y los derechos de los demás”.