Hasta ahora la única candidatura presentada es la de Antonio Garamendi, actual presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), que se postuló el pasado 12 de septiembre, misma fecha en la que la patronal convocó oficialmente las elecciones.

Garamendi es presidente de Cepyme desde 2014 y el año pasado fue reelegido para el cargo por un periodo de cuatro años, por lo que, en principio, la organización celebrará sus próximas elecciones en 2021.

CEOE cuenta con 225 federaciones y confederaciones, de las cuales 64 son territoriales autonómicas y provinciales, y 161 sectoriales de ámbito nacional. Las que más peso tienen al contar tradicionalmente con mayor número de vocales para las elecciones son Cepyme, que suele tener unos 83 votos, y las regionales madrileña y catalana CEIM y Foment del Treball, con unos 45 votos cada una. En total, son unos 740 el número de vocales que votan en las elecciones.

La proclamación de Garamendi como presidente de CEOE implicará el cambio de Presidencia en Cepyme. Los Estatutos de la organización de pymes, consultados por Servimedia, establecen que “en el caso de que la Presidencia de Cepyme quedara vacante por cualquier circunstancia, el nuevo presidente será propuesto por y entre los vicepresidentes, y su cargo durará por el periodo que reste hasta el fin del mandato del cesado”. Esta propuesta será sometida a refrendo de los 25 órganos de gobierno de Cepyme y será provisionalmente ejecutiva una vez ratificada por el Comité Ejecutivo y por la Junta Directiva.