El regulador ha analizado a petición de la Dirección General de la Racionalización y Centralización de la Contratación los pliegos de la última licitación.

El valor estimado de este contrato, que es la segunda fase del suscrito en 2015 por la AGE, asciende a 466,7 millones de euros.

Tras el análisis de los borradores de pliegos, la CNMC recomienda varios cambios. En cuanto a los lotes, observa que la división y el tamaño de los lotes que se plantean suponen una limitación de oferentes en la licitación, especialmente debido a las fuertes barreras de entrada relacionadas con los criterios de solvencia. Para la comisión, su redefinición favorecería la presencia de un mayor número de licitadores.

En cuanto a los criterios exigidos de solvencia económica y financiera, así como las condiciones y períodos de provisión de información detallada por parte de cada sede de la AGE, la CNMC cree que pueden suponer "un obstáculo significativo para cierto perfil de operadores".

La CNMC también pone peros a los criterios de adjudicación. Considera que "no son los más idóneos para seleccionar a los adjudicatarios, especialmente si consideramos la fuerte incidencia en la competencia que tiene la contratación de servicios de telecomunicaciones por parte de la AGE".

Sobre la duración del contrato, aconseja fundamentar la duración prevista y justificar de forma razonada las prórrogas que excepcionalmente pudieran aplicarse.

Competencia también pide que se elabore un diagnóstico de situación del mercado y realizar una verdadera estrategia de contratación de forma que se licite de manera más eficiente. El análisis de la ejecución del contrato de servicios consolidados en vigor es, de hecho, uno de los elementos imprescindibles en esa tarea.

Finalmente, recomienda reforzar el grado de conocimiento de la normativa de competencia, explicitada en los propios pliegos, así como el compromiso de los operadores en la lucha contra conductas anticompetitivas.