La proposición, de ser aprobada, obligaría a reformar el Estatuto de los Trabajadores, el Estatuto Básico de la Función Pública y varias leyes, y argumenta que la jornada de ocho horas se hizo pensando en un trabajador hombre desocupado del hogar y de cuyo tiempo de ocio quedaban excluidas las mujeres. Ahora, según Unidos Podemos, se pretende “adaptar los puestos de trabajo a nuestra vida y no al revés”.

Respecto al contrato de tiempo parcial, el profesor Jaima Cabeza, que ha participado en la elaboración del texto, denunció que se ha ido desregulando, quedando como instrumento de “domesticación de los jóvenes” y apartando a muchas mujeres de esta posibilidad porque la flexibilización se limita a la que le conviene unilateralmente a la empresa para tener siempre disponible al empleado en horarios impredecibles.

La propuesta defiende que, igual que la empresa dispone de un 5% de horas para asignar con flexibilidad, el empleado tenga un porcentaje equivalente en un banco de horas; que las horas extra sean retribuidas y no compensadas por tiempo libre; que sea obligatorio registrar la hora de entrada y salida al trabajo y que las infracciones por parte de las empresas en el abuso de esta tipología se sancionen con eficacia.

Propone también que el paso de tiempo completo a tiempo parcial lo elija el trabajador y no la empresa y que, si se halla en esta segunda tipología, tenga prioridad para pasar a tiempo completo frente a contrataciones externas. Respecto al permiso de lactancia, apuesta por abrirlo también a los hombres, puesto que en la práctica se utiliza para quedarse cuidando al recién nacido y es la mujer la que tiene que utilizarlo.

PERMISO POR FUERZA MAYOR

En cuanto al permiso de fuerza mayor, que ya existe en la Unión Europea, se trataría de una posibilidad a la que podría acogerse el empleado o empleada cuando, por ejemplo,no tiene a nadie con quien dejar a un niño, o debe quedarse cuidando a un familiar o atendiendo una urgencia doméstica, sin que ello suponga motivo de despido de su empresa.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, defendió que la democracia es el mejor sistema porque es el que más nos permite "ser felices", y eso exige la seguridad de saber que hay servicios sociales y se va a llegar a fin de mes y también tiempo para disfrutar. "Es mentira que la prosperidad se tenga que basar necesariamente en la explotación", denegó, citando ejemplos concretos de personas que podrían beneficiarse de la propuesta.

“El tiempo de trabajo se ha desregulado de manera salvaje”, denunció la portavoz adjunta del grupo, Ione Belarra, añadendo que eso no ha venido acompañado de mayores garantías para los trabajadores, conduciéndoles a la pérdida del control de su tiempo y a la “precariedad total”. Además, subrayó que las mujeres, en tanto que tenedoras del mayor número de trabajos a tiempo parcial, serán las principales beneficiadas de la iniciativa, si se aprueba.

Tanto ella como Iglesias alabaron a la diputada de En Marea Yolanda Díaz. Belarra la definió como "autora intelectual y casi material" del texto e Iglesias bromeó que se la estaba poniendo "cara de ministra" y España merece un Gobierno de Unidos Podemos o al menos uno en el que Díaz sea ministra.