Álvarez asegura que su relevo como ‘número dos’ del Santander no traerá un viraje en el rumbo del grupo

- El banquero se declara "encantado" por asumir responsabilidades estratégicas en la nueva etapa

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, que el próximo mes de enero será sustituido en el cargo por Andrea Orcel, que llega de UBS, justificó hoy el movimiento en un cambio de responsabilidades y negó que traiga consigo un viraje en la estrategia del grupo.

El banquero defendió que la hoja de ruta del Santander será la misma pero él prestará “menos dedicación al día a día, y más a los temas estratégicos”. “Estoy encantado de cambiar de posición”, aseguró Álvarez, que asumirá la Vicepresidencia del grupo y la Presidencia de Santander España –donde se ha integrado el Popular-, en sustitución de Rodrigo Echenique.

Al efectuar balance durante la presentación de los resultados destacó que ha estado casi 14 años como director financiero y cuatro como consejero delegado. “No puedo estar más contento. Hoy es una referencia en el mundo (…) y seguirá siendo una referencia de la banca mundial y un icono de la banca mundial”, indicó.

NIEGA OTRA AMPLIACION DE CAPITAL

El banquero negó de forma tajante que entre los deberes del futuro consejo delegado vaya a abordarse una ampliación de capital pese a la especulación en el mercado o las reivindicaciones de los supervisores al conjunto de la industria.

“No, definitivamente no”, dijo a preguntas directas, asegurando que el grupo no hará “una ampliación de capital sin más” porque está confortable con la hucha de solvencia. “Tenemos un target y estamos en camino de conseguir esos objetivos”, refirió.

Para 2018, el Santander se había marcado la meta de elevar el ratio de capital más exigente CET1 fully loaded por encima del 11% y en septiembre lo situó en el 11,11%. Según defendió, la entidad, como cualquier otro banco, tiene que conjugar una tasa adecuada de solvencia con una rentabilidad, y aseguró que el Santander destaca ahí entre los comparables. “Eso muestra cómo nos percibe el mercado, en cuanto a fortaleza de capital y del modelo de negocio”, indicó.

SOLVENCIA Y RENTABILIDAD

Durante la presentación de los resultados hasta septiembre, Álvarez reivindicó que son "buenos resultados, consistentes y con alta recurrencia", que han permitido elevar¡ un 5% el beneficio por acción y permitirán mejorar éste mismo ratio a dos dígitos a finales de año.

El beneficio creció un 13% y se situó en 5.742 millones, pese a sufrir un impacto de 169 millones por la hiperinflación en Argentina y un cargo en trimestres previos de 300 millones por el coste de integración del Popular.

La cuenta sufre, sin embargo, la volatilidad de los mercados y la depreciación de las divisas. A tipos constantes, el resultado mejoraría de hecho un 28%, detalló Álvarez.

Su progresión se apoya en una "mayor vinculación" de clientes, cuyo censo sube un 19% hasta los 19,6 millones, con unos usuarios más activos en la operativa y contratación de productos. Una situación que se tradujo en expansiones del 9% en los ingresos de clientes producto de una mejora del 8% en el margen financiero y del 10% en la recaudación por comisiones.

El resultado es que elevó el Rote o rentabilidad sobre capital tangible al 12,1%, el ratio de capital más exigente CET1 fully loaded lo situó en el 11,11%, y el beneficio por acción sube un 5% con dicha expectativa de que progrese a ritmos de dos dígitos a fin de año.

El banquero subrayó que el banco ha batido el objetivo de lograr 18,6 millones de clientes vinculados -censó 19,6 millones a cierre del año-, expandir los ingresos por comisiones un 10%, situar la eficiencia por debajo del 47%, alcanzar el 11% de ratio de capital o mejorar el Rote por encima del 11,5%.

(SERVIMEDIA)
31 Oct 2018
ECR/gja