Infancia
El Gobierno trabaja para que no prescriban los abusos a menores y quitar "el manto de silencio" sobre dónde se producen
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La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, apuntó este martes que el Gobierno trabaja para que los abusos a menores no prescriban y "levantar el manto de silencio" que existe sobre los que se producen especialmente en el ámbito familiar, donde se calcula que se registran casi el 70% de los abusos a niños.
Así lo manifestó a la prensa antes de presidir en Madrid el Consejo Estatal del Pueblo Gitano, colectivo que según Carcedo tiene "necesidades singulares" y por el que el Gobierno dice estar trabajando en medidas relativas a educación, género, vivienda y salud.
La ministra defendió que el Ejecutivo está en contacto con las organizaciones de infancia desde hace meses para abordar la futura ley de violencia contra la infancia y rechazó las críticas de que el equipo de Sánchez haya hablado de abusos a menores con el Vaticano antes que con esas entidades.
"Esta ley es necesaria porque existe un manto de silencio por cómo se producen los abusos a la infancia. Se producen donde están los niños: y los niños están en el ámbito familiar, en el ámbito escolar, en el ámbito deportivo... En ámbitos de supuesta confianza donde los niños se relacionan con personas que tienen una autoridad de distinto tipo. Por eso existe este manto de silencio y por eso la gravedad es mayor", argumentó para justificar la necesidad de la ley.
Carcedo explicó que la norma busca "que la sociedad sea consciente de dónde se están produciendo estas situaciones y que el abusador no se vaya de rositas". "La ley tiene que evitar que se produzca la prescripción del delito y, por tanto, la impunidad de la persona abusadora. Eso es lo que se está trabajando", recalcó.
Carcedo apuntó que ése es "uno de los objetivos" de la ley contra la violencia hacia la infancia en la que se está trabajando, asunto sobre "el que tiene mucho que decir el Ministerio de Justicia", proponente junto a Sanidad de esa futura ley.
DENUNCIAS DE ADULTOS
"Queremos regularlo de forma que la ley evite la mayor parte de los casos, pues cuando la persona se decide a denunciar, ya adulta, en muchos casos ya ha prescrito", dijo sin concretar si se establecerán, por ejemplo, en un plazo de 30 o 50 años después del abuso.
Esto permitiría que "la persona abusada tenga la tranquilidad de poder denunciar en el momento en que psicológicamente se encuentre cómoda y con la suficiente madurez para afrontar ese proceso, porque es como vivir una segunda fase del abuso", dijo.
(SERVIMEDIA)
30 Oct 2018
AHP/caa