Al protagonizar este desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, López-Istúriz defendió que su deber es alertar de que las últimas decisiones de Sánchez “nos alejan mucho del nivel de confianza y respeto” internacional del que gozaba España bajo el mandato de Mariano Rajoy o el de José María Aznar.

Frente a la proclama de Sánchez de “volver al corazón de Europa”, el secretario general del PPE explicó que el objetivo de su grupo es estar “en la cabeza de la Unión Europea (UE)”, una “histórica ambición, justa y merecida por el pueblo español”. “Fuera de la UE hace frío, vivimos en una burbuja de prosperidad”, reivindicó al comentar las consecuencias del ‘Brexit’.

En este contexto en el que hay que “lidiar populistas mentirosos” en Europa, se mostró seguro de que el PPE se mantendrá como “principal fuerza política” en el Parlamento Europeo y que los “mayores perdedores serán los socialistas”, porque la socialdemocracia europea “va a cosechar lo que ha sembrado” tras perder “la credibilidad”.

En este punto, dijo que le “preocupa” la imagen de España actualmente y que el gabinete de Sánchez gobierne en base a “maniobras” y el apoyo de los independentistas. “Durante los gobiernos del presidente Aznar y Rajoy, España recuperó la imagen de país responsable”, enfatizó el secretario general del PPE.

Ahora, prosiguió López-Istúriz, está al frente del país “un aventurero que viene a tirar por la ventana todo nuestro esfuerzo, poniendo en riesgo la estabilidad económica y poniendo en riesgo la imagen de estabilidad de España”. “Nos negamos a que la historia se repita por tercera vez”, sentenció, aludiendo al “círculo vicioso” por el cual un Gobierno socialista “destroza la economía española”.

“No me gustaría que cuando Casado se convierte en presidente del Gobierno tenga que estar entre sus prioridades la reconstrucción de nuestra economía y nuestro mercado laboral como consecuencia de las nefastas políticas que estamos viviendo”, indicó, para a renglón seguido defender que “necesitamos un hombre de Estado”.

En este punto, opinó que Casado está “preparado” para “dar a España el lugar que se merece y que tantas veces se ha intentado negarle en el panorama europeo internacional”. En concreto, dijo tener constancia de que la canciller alemana, Angela Merkel, se quedó “gratamente sorprendida” tras conversar con el actual líder del PP.

Dicho esto, explicó que en Europa “nos están observando y no van a permitir aventuras presupuestarias”, por lo que “necesitamos un hombre de Estado”. “Todavía hay tiempo para pensar en el bien de nuestro país ignorando a los demagogos, populistas y comunistas metidos a populistas y sentarse con las fuerzas moderadas para presentar unos Presupuestos que nos permitan seguir creciendo con responsabilidad”, recomendó a Sánchez.

“Me preocupa que nos podamos convertir en un problema para Europa”, sentenció, basándose en que “las últimas decisiones de Sánchez nos alejan mucho del nivel de confianza y respeto que tenía Rajoy y antes Aznar”. “Desgraciadamente, los guiños de Sánchez a los independentistas, sus socios de Gobierno, amenazan todo el trabajo que se ha hecho desde el PPE”, agregó.

En todo caso, sobre Cataluña y el secesionismo, subrayó que en el Parlamento Europeo se han conseguido paralizar todos los debates “extravagantes” que querían poner “en entredicho la madurez democrática de España”. “El apoyo de Europa a la integridad de España es incondicional y los únicos que apoyan el independentismo catalán en Europa son la ultraderecha y no todos”, sostuvo.

Alertó del riesgo de que Sánchez necesite “asociarse” con populistas e independentistas para mantenerse en el poder, “que ha demostrado una y otra vez que es lo único que le interesa”. En cambio, defendió que Casado “no está aquí para hacerse el importante, sino para ser útil a los españoles”.

Por último, en cuanto a la postura del Gobierno español con respecto a Venezuela, hizo especial hincapié en que ante la situación “insostenible” que vive este país las sanciones al “régimen de Nicolás Maduro” se deben “mantener y ampliar”. Esta es una labor, recalcó, que corresponde especialmente a España por ser “puente” con Iberoamérica.