Elecciones andaluzas
El PSOE prevé una subida en votos que no tendrá traducción en aumento de escaños
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El PSOE de Andalucía se ve como claro vencedor de las próximas elecciones autonómicas convocadas por la presidenta de la Junta, Susana Díaz, para el próximo 2 de diciembre.
La victoria sobre el Partido Popular, que los socialistas no creen que vaya a perder la segunda posición, se conseguirá por una subida en el número de votos para el PSOE pero que, por aplicación de la ley D´Hont, no tendrá traducción en un mayor número de escaños socialistas en el Parlamento andaluz.
El escenario que contemplan los socialistas, según varias fuentes andaluzas y federales consultadas por Servimedia, es un aumento del número votos pero una ligera caída en escaños, que les haría pasar de los 47 actuales a 44-45 parlamentarios. Sin embargo, creen que la “ventaja” que tendrá Díaz sobre el PP que encabeza Juan Manuel Moreno rondará los 10 puntos, por lo que “nadie pondrá en duda” que ella es la vencedora y la única con capacidad para formar Gobierno.
En este escenario también prevén que PP y Ciudadanos quedarán por este orden en las elecciones, pero vaticinan que la suma de sus escaños no será suficiente para erigirse como alternativa a un Ejecutivo liderado por Díaz.
FORMACIÓN DE GOBIERNO
En el PSOE andaluz, según fuentes consultadas por Servimedia, no contemplan otro gobierno que no sea uno "en solitario" presidido por Díaz, y aunque saben que no llegarán a la mayoría absoluta, buscarán el apoyo de alguna otra formación para la investidura.
Conscientes de que las elecciones andaluzas tendrán una lectura a nivel nacional, en el PSOE andaluz creen que serán difíciles las negociaciones para la formación de Gobierno y que habrá una sensación de bloqueo similar a la que se produjo en 2015. No obstante, afirman que este bloqueo no se prolongará más allá de marzo.
En ese marco también sitúan la posibilidad de que las tres fuerzas políticas de la oposición (PP, Cs y Podemos) se unan para quitarle la Presidencia del Parlamento al PSOE, de manera que los tiempos serían dominados por la oposición.
Según el Estatuto de Autonomía, deben transcurrir dos meses desde la primera votación fallida para la investidura del presidente del Gobierno autonómico antes de que se convoquen automáticamente unas nuevas elecciones. Ese escenario se produciría a escasos dos meses de las municipales y autonómicas en otros territorios, lo que, para el PSOE, podría pasar factura a los partidos que impidan la investidura de Díaz.
Así las cosas, un veterano dirigente andaluz reconoce que parte del hecho de que las elecciones se hayan adelantado a diciembre -tocaban en marzo- se enmarca en esta jugada política.
(SERVIMEDIA)
25 Oct 2018
MML/caa