El informe contó con 571 votos a favor, 53 en contra y 34 abstenciones. La Comisión Europea ya adoptó una propuesta de directiva el pasado mes de mayo y ahora le toca el turno al Consejo Europeo. Una vez que los ministros de medio ambiente fijen su posición comenzarán las negociaciones entre la Eurocámara y el Consejo para consensuar una decisión definitiva.

El Ejecutivo comunitario ya propuso reducir los 10 productos de plástico de un solo uso que se encuentran con más frecuencia en las playas y los mares de Europa, así como las artes de pesca perdidas y abandonadas.

Los eurodiputados añadieron a la lista de productos que tienen que desaparecer del mercado los palitos para globos, los productos de plástico oxodegradable y los contenedores de comida rápida de poliestireno expandido.

El informe aprobado este miércoles indica que el consumo de determinados productos que resultan contaminantes, pero para los que no existe alternativa, tendrá que reducirse al menos un 25% para 2025. En esta categoría están los envases de un solo uso para hamburguesas, sándwiches, frutas, verduras, postres y helados. Los Estados miembro tendrán que diseñar planes nacionales para incentivar el uso de productos que puedan ser reutilizados, así como el reciclaje.

Otros plásticos, como las botellas para bebidas, deberán recogerse separadamente y su porcentaje de reciclaje tendrá que alcanzar el 90% en 2025.

FILTROS DE TABACO

Los eurodiputados también quieren que las medidas de reducción se apliquen a los productos del tabaco, y en particular a los filtros que contienen plástico. Los residuos de esos filtros deberán reducirse el 50% para 2025 y el 80% para 2030. Una colilla puede contaminar entre 500 y 1.000 litros de agua, y abandonada en una cuneta puede tardar hasta 12 años en desintegrarse.

Además, pretenden que los países garanticen también que al menos la mitad de los aparejos de pesca que contengan plástico perdidos o abandonados sean recuperados, con un porcentaje de reciclaje de al menos un 15% para 2025.

La propuesta de la Eurocámara indica que los Estados miembro tendrán que asegurarse de que las compañías tabacaleras cubren los costes de recogida de sus desechos, incluido el transporte y tratamiento. El mismo principio deberá aplicarse a los productores de aparejos de pesca con plástico, que tendrán que contribuir a alcanzar el objetivo de reciclaje.

Según la Comisión Europea, más del 80% de la basura marina son plásticos. Los productos cubiertos por esta propuesta constituyen el 70% de los desechos que llegan al mar. Dado su lento proceso de descomposición, el plástico se acumula en mares, océanos y playas, es ingerido por animales como tortugas, focas, ballenas y aves, y también por pescados y mariscos. De esta manera, llega a nuestros platos.