De esta forma, la compañía volvió a tener una fuerte bajada, situando el valor de sus valores en 0,6644 euros por acción al cierre de la jornada, como las que ya tuvo la semana pasada, en la que se dejó un 53,6% tras rebajar sus previsiones de 2018 y dejar en suspenso su política de dividendos para 2019.

En concreto, el 15 de octubre, DIA se dejó un 42,2% tras realizar dicho anuncio, que incluía un descenso en sus volúmenes de ventas y del incremento de sus gastos operativos. Así, las acciones de DIA pasaron de valer 1,8985 euros por acción el viernes 12 de octubre a 0,88 euros por acción siete días después, el viernes 19. Durante la semana, las acciones de DIA llegaron a tocar su mínimo histórico el miércoles 17, bajando a 0,85 euros por acción. Así, en la sesión de este lunes los valores de DIA han vuelto a hundirse hasta un nuevo mínimo histórico, al caer hasta los 0,6644 euros por acción.

Esta nueva caída llega después de que la compañía, en un hecho relevante remitido esta mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), reformulase sus cuentas correspondientes al ejercicio 2017, en las que refleja que obtuvo un beneficio neto de 90 millones de euros, 20 millones menos de lo que comunicó anteriormente.

La sociedad explicó que el efecto en el beneficio del ejercicio 2017 por importe de 20 millones de euros (26 millones de euros antes del efecto fiscal) corresponde, en su mayor parte, a sobreestimaciones realizadas al cierre de dicho periodo en los descuentos comerciales a percibir de proveedores.

DIA consideró que debían incorporarse determinados ajustes a los estados financieros consolidados correspondientes al ejercicio 2017, que se estimó podrían tener un efecto patrimonial negativo por un importe valorado en, aproximadamente, 70 millones de euros.