En declaraciones antes de la Junta de Portavoces, Tardà aclaró que aún no ha habido ninguna reunión entre el Gobierno y ERC sobre los Presupuestos, pero reiteró que para que pudiera haber una negociación es “imprescindible” que el Ejecutivo inste públicamente a la Fiscalía a retirar esas acusaciones.

“No pedimos que haga lo que no puede hacer”, puntualizó, aceptando que el Gobierno no puede forzar a la Fiscalía a actuar en un sentido, pero insistiendo en que “instar” sí puede hacerlo.

Pese a esta exigencia, Tardà afirmó que, como un Gobierno socialista sostenido por Podemos siempre será más dialogante que uno del PP apoyado en Ciudadanos, ERC cree que el escenario actual “debería consolidarse” y sería deseable que el PSOE “tuviera la convicción y el marco de seguridad política suficiente para dar aquellos pasos imprescindibles para resolver la cuestión catalana”. Es más, diagnosticó que, sin resolverla, no podrá existir un Gobierno progresista, sino que aquélla “acabará siendo su tumba política”.

De esa forma, Tardà se distanció del ultimátum que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, lanzó la semana pasada a Sánchez poniendo noviembre como fecha tope para que ofrezca un referéndum acordado si quiere seguir contando con el apoyo de los grupos independentistas