Rivero, que compareció en la Comisión de Políticas Sociales y Familia de la Asamblea regional para informar sobre políticas en materia de integración de inmigrantes en la región, aseguró que el citado plan está “prácticamente terminado, a expensas de incorporar todo lo relacionado con los menores extranjeros no acompañados”.

Destacó que desde junio han llegado a la Comunidad unos 500 menores no acompañados y consideró que son “muchísimos” en relación con cualquier otra etapa.

Tras señalar que “Madrid no tiene puerto de mar pero han desembarcado aquí estos menores”, añadió que la necesidad de incluir esta circunstancia ha obligado a retrasar la aprobación del Plan Regional de Inmigración.

La directora general manifestó que estos inmigrantes no acompañados son “antes menores que extranjeros” y, por lo tanto, es una competencia de la Comunidad de Madrid, por lo que “hemos tomado cartas en el asunto con la puesta a disposición de una mayor números de plazas”.

“La opinión generalizada de la Comunidad de Madrid es que hay que incorporar esa circunstancia al nuevo plan”, indicó Rivero, quien agregó que “enriquecer el plan es muy importante”.

Entre otras causas para no tener aprobado el plan, citó también los cambios en el Gobierno autonómico con la salida de Cristina Cifuentes de la Presidencia y la llegada de Ángel Garrido, quien puso al frente de la Consejería de Políticas Sociales y Familia a Lola Moreno, en sustitución de Carlos Izquierdo.

Rivero indicó que, “por las circunstancias comentadas, se ha ido ralentizando” la aprobación del citado plan y destacó que ”tenemos que ser conscientes de que la nueva situación, con la incorporación de los menores extranjeros no acompañados, requiere de un análisis y una reflexión”.