La Fiscalía considera que no se pueden reclamar responsabilidades penales al líder popular por el máster que cursó hace 10 años y del que se sospecha que pudo haber aprobado gracias al trato de favor que podría haber recibido.

La Sala de Admisión del Tribunal Supremo tiene ahora ante sí la decisión de investigar las presuntas irregularidades del máster cursado por Pablo Casado en la Universidad Rey Juan Carlos incluso en contra del criterio del ministerio público.

El TS puede decidirse por investigar a Casado, por sobreseer la causa o por devolverla a la jueza de Madrid que elevó la exposición motivada para que dé al líder popular la posibilidad de comparecer voluntariamente y de entregar la documentación que obre en su poder.

Casado había presentado la pasada semana un escrito en el que solicitaba que se rechazara abrir una investigación, alegando que no hay indicios de la comisión de los delitos de cohecho impropio y prevaricación administrativa que le atribuye la jueza de Madrid y que, en cualquier caso, estarían prescritos.

La Sala de Admisión del Tribunal Supremo, formada por cinco magistrados, solicitó a la Fiscalía que le remita el correspondiente informe sobre la idoneidad de investigar a un aforado. Los miembros de la Sala de lo Penal son el presidente, Manuel Marchena; el instructor de la causa del 'procés', Pablo Llarena; los magistrados Francisco Monterde y Miguel Colmenero, todos ellos situados en mayor o menor medida en el área conservadora, y la magistrada progresista Ana Ferrer.

El pasado 6 de agosto, la magistrada del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez-Medel, trasladó al Supremo la causa al apreciar "indicios de responsabilidad penal" en una exposición motivada que el TS tiene pendiente de admitir a trámite para investigar el presunto “regalo” del máster a Casado.

El informe de la Fiscalía no es vinculante para la Sala de Admisión, que puede pronunciarse en el mismo sentido o no tenerla en cuenta, aunque esta última posibilidad es menos frecuente. Así, de optar por la admisión a trámite comenzaría una investigación con la designación de un instructor. Sin embargo, si la exposición motivada de la jueza no aporta suficientes indicios, el Supremo puede acordar el sobreseimiento libre, que significaría el fin de la causa.

Por último, el TS podría devolver a Carmen Rodríguez-Medel la causa con la instrucción de que dé la oportunidad a Casado de comparecer voluntariamente para responder a sus preguntas y aportar la documentación que obre en su poder, de manera que se agote la instrucción de esta causa antes de decidir si es preciso remitirla al Supremo.