SCC informó este lunes de que su presidente, José Rosiñol, presentará esta denuncia a las diez de la mañana de este martes en la Ciudad de la Justicia de Barcelona.

Esta plataforma informó de que presentará esta denuncia por los “los lamentables hechos que se produjeron en la manifestación del pasado domingo”, en referencia a que los CDR impidieran a los manifestantes en favor del castellano llegar hasta la plaza de Sant Jaume, donde habían colocado un escenario, todo lo cual contaba con permiso oficial.

En este sentido, SCC dio a conocer también este lunes que Rosiñol ha enviado una carta al presidente de la Generalitat, Quim Torra, en la que le acusa de haber permitido los CDR impidieran la llegada de la marcha en favor del castellano a la plaza de Sant Jaume.

Rosiñol expresa en la misiva a Torra su “consternación” por el hecho de que los CDR, con un “planteamiento típicamente fascista”, ocuparan “un espacio que es de todos los ciudadanos (por la plaza de Sant Jaume) e impidieron que miles de catalanes pudieran ejercer su derecho fundamental a manifestarse, de acuerdo con el itinerario que había sido autorizado por la Administración pública”.

ACTUACIÓN “PARTIDISTA”

Frente a esta situación, Rosiñol criticó que “en vez de defender los derechos de todos los catalanes sin importar su signo ideológico, los responsables del orden público de la Generalitat y los dirigentes de los Mossos de d'Esquadra actuaron de forma partidista”, en referencia a que no desalojaron a los independentistas de la plaza de Sant Jaume.

El presidente de SCC se quejó de que los agentes de la Policía catalana, “en lugar de garantizar las condiciones para que pudieran manifestarse tranquilamente según el itinerario previsto, dejaron que grupos radicalizados ocuparan la plaza de Sant Jaume”.

“Los derechos de todos los catalanes no pueden seguir viéndose condicionados por grupos para-políticos que creen que el espacio público es suyo”, añade Rosiñol en la misiva.

Por este motivo, el presidente de SCC demandó a Torra “que trabaje para recoser la sociedad catalana, en vez de acentuar su fractura”, de forma que si no lo hace los constitucionalistas volverán a manifestarse como hicieron en Barcelona el 8 y 29 de octubre del pasado año.