En un comunicado, el sindicato insistió en la necesidad de reducir la fiscalidad de la electricidad, igual que de otros suministros básicos, y aplicar un IVA súperreducido, por ser considerado un servicio esencial para la ciudadanía.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, manifestó que “lo que está ocurriendo en este país es un escándalo” y “no hay razón para que esto sea así”. Por eso, instó al Gobierno a “regular el sector eléctrico y el tema de la energía de manera drástica, porque, a diferencia de lo que ocurre en Francia o Italia, España no tiene una empresa pública de referencia en el sector energético. Esos errores hay que subsanarlos intentando que el sector público participe en alguna eléctrica, y con una regulación estricta que nos permita superar esta situación”.

El sindicato criticó la ley del sector eléctrico aprobada por el anterior Gobierno en 2013 por suponer una luz más cara, menos calidad del servicio y menos empleos, y consideró que es el momento de abrir un debate público para regular “adecuadamente” al sector eléctrico, en aras del interés general.

El sindicato también reclamó al Gobierno que amplíe el bono social y lo haga más inclusivo, puesto que el aprobado por el anterior Ejecutivo no garantiza que los consumidores puedan acceder al suministro básico de electricidad en condiciones de igualdad y es insuficiente para evitar los cortes de suministro en los casos de pobreza extrema, a juicio de UGT.