Según sus estatutos, la persona designada como presidente podrá ejercer el cargo como máximo durante dos mandatos consecutivos de cuatro años cada uno, con lo que la etapa del actual presidente, Juan Rosell, finalizará próximamente.

Entre los nombres que suenan para sucederle se encuentra el del actual vicepresidente de CEOE y presidente de Cepyme, Antonio Garamendi, quien ya aseguró que no descarta postularse para dirigir la patronal.

Garamendi afirmó en junio que “tenemos un futuro potente en el cual trabajar e innovar, no es cuestión de revolución pero sí de evolución; y creo que estaremos todos juntos para pensar quién es el que mejor puede gestionar este futuro. Y yo, efectivamente, soy uno de ellos y ahí estoy”.

En 2017, CEOE registró pérdidas por 741.000 euros, frente al superávit de 2.000 euros que logró un año antes, debido fundamentalmente a las provisiones por valor 13,16 millones, de las que la mayor parte se debieron a una reclamación del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) por planes de formación.