Illa participó en un acto del PSC en Castell-Platja d´Aro, en Gerona, en el que también el ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, acusó tanto a Rivera como a Casado de competir con el "manual del perfecto derechoso" en su oposición al Ejecutivo.

Defendió que en solo dos meses el Gobierno ha demostrado que "hay una España diferente que es posible", y aseguró que los socialistas desplegarán su acción política para aglutinar a quienes quieren "trabajar para facilitar un acuerdo entre catalanes, primero, y después entre los catalanes y el resto de españoles".

Se mostró convencido de que en el independentismo habrá quien busque "un nuevo momento para volver a repetir lo que ha fracasado", un "intento de dictadura" ignorando que en Cataluña no hay una mayoría social por la independencia. Frente a ello, la apuesta del PSC se resume en "respeto, reconciliación y reformas".

Illa alertó a los independentistas de que el Estado de Derecho "hay que respetarlo", y si se quiere modificar hay que hacerlo mediante los mecanismos establecidos, pero cargó contra la campaña de "ley y orden" emprendida por Ciudadanos, que decía proceder de la socialdemocracia, ahora han optado por el neoliberalismo y "parece que compran conceptos de la derecha extrema europea y norteamericana". Pidió a ese partido "un poco de seriedad, los pies en el suelo y los principios bien establecidos", porque en solo tres años ha pasado de definirse como socialdemócrata a "flirtear con la derecha extrema".

Sin querer "especular" con el calendario electoral en Cataluña, aseguró que los socialistas "estaremos preparados ante cualquier eventualidad", apoyando la tarea del Gobierno, que consideran "positiva" y que "nos enorgullece", y trabajarán en las municipales de 2019, "esenciales" para el futuro.