Así lo indicó en la rueda de prensa posterior al Comité Ejecutivo Nacional del PP, que se reunió en Barcelona, en la que anunció que el partido exigirá, “si hace falta y se vuelven a conculcar los derechos más fundamentales”, que se aplique el 155.

Casado comentó que la independencia y la ruptura de la unidad en España es una línea “absolutamente roja” que no van a permitir que se sobrepase, porque, además, “hemos aprendido de los engaños en los últimos meses”.

Recordó que el PP sigue teniendo la mayoría absoluta en el Senado y hará uso de ella “si intentan volver a plantear la construcción de estructuras de Estado, el Diplocat, o a usar TV3 como propaganda”.

Ante el desafío independentista en Cataluña, Casado apostilló que su partido trabajará en esta comunidad “apelando a la concordia y acabando con la ira”. “El diálogo solo cabe dentro de la legalidad y no se puede ceder ante los que plantean cosas fuera de la legalidad, porque eso es la selva”.

Afirmó que ofrece su mano a Sánchez para luchar contra el secesionismo y aseguró que ejercerá su oposición de "forma implacable". "Estamos para servir a España y no podemos ceder al chantaje", remarcó.

COLUMNA VERTEBRAL

El nuevo líder del PP remarcó que los dirigentes del partido en Cataluña van a ser “nuestra columna vertebral” tanto en esa comunidad como en el resto de España. “Serán nuestra vanguardia a la hora de defender nuestro principios, que empiezan por vivir en paz y libertad sin ninguna quiebra”, manifestó.

A este respecto, aseguró que los populares estarán en la vanguardia “ante el nuevo desafío secesionista provocado por la inacción del Gobierno de España”.

Casado afirmó que en la reunión del Comité Ejecutivo de hoy se constató que el PP ha vuelto a Cataluña y “lo ha hecho para quedarse, para estar presente en la sociedad mediática, en la sociedad civil, en los debates que se tienen que trasladar”.

Asimismo, indicó que quieren ser “la fuerza útil”, porque “hay algún partido que, a pesar de su mayoría parlamentaria, no está demostrando utilidad a la hora de poner freno al secesionismo en el propio Parlament”.