Los promotores de la campaña indican que en la época veraniega confluyen dos circunstancias que alteran negativamente la normalidad en las donaciones: por un lado, los desplazamientos vacacionales de los donantes habituales, que pueden provocar un descenso en las reservas; por otro, un consumo que puede aumentar debido a accidentes de tráfico y deportivos y otros problemas de especial incidencia en esta época.

Con esta iniciativa, las entidades impulsoras de la campaña animan a todos a ofrecer un poco de tiempo para realizar una donación, especialmente en estas semanas de julio y agosto, porque "las enfermedades o accidentes no toman vacaciones" y la aplicación de hematíes, plasma, plaquetas, células madre, derivados plasmáticos, medicamentos, etcétera es fundamental en terapias o servicios de oncología, leucemias, linfomas, partos, trasplantes de órganos, cirugía de todo tipo, hemorragias, etc.

Asimismo, resaltan que en España se llevan a cabo unas 6.000 transfusiones diarias, lo que promedia unas 80 vidas salvadas cada día a causa de la sangre donada en cualquiera de sus componentes, así como la recuperación o mejora de calidad de vida de otros 375 enfermos o accidentados también cada 24 horas.