Estos nueve reconocimientos se añaden a los tres aprobados anteriormente, con lo que ya son 12 las víctimas condecoradas. Tres son de nacionalidad española, tres italiana, dos portuguesa, una alemana, una australiana, una canadiense y una argentino-española.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Educación y portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá, afirmó que “el Gobierno guarda un recuerdo muy emocionado de las víctimas de aquel deplorable atentado”.

La Dirección General de Apoyo a Víctimas del Terrorismo tramita estos expedientes previa consulta a los destinatarios. Por esa razón los decretos se aprueban en distintos momentos.

Hasta el momento no han presentado solicitud los familiares de cuatro de los 16 fallecidos en los atentados, pese a que todos ellos han sido informados de su derecho a recibir esta condecoración.

La Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo es una acción del Estado para honrar a las víctimas del terrorismo y un reconocimiento público de la sociedad española a su sacrificio en aras de la defensa del Estado español y de sus ciudadanos. Dicha condecoración se otorga, con el grado de Gran Cruz, a título póstumo.