En un comunicado, la compañía informó de que ha decidido, además de estos dos despidos, suspender de empleo temporalmente a otros cinco empleados mientras siguen las investigaciones y se aclaran los términos de su posible implicación en los hechos.

La compañía aseguró que ni Sacyr ni ninguna de sus filiales han participado en ninguna de las actuaciones investigadas, sino que “los partícipes de la trama eludieron de forma premeditada los controles de Sacyr, actuaron al margen de la misma para su beneficio particular e infringieron gravemente el código de conducta” de la compañía.

Por último, manifestó que "seguirá colaborando con la Justicia en todo lo que sea necesario para aclarar el caso".

Sacyr, a través de su filial Valoriza Medioambiente, adquirió la empresa Aplicaciones Gespol, dedicada al mantenimiento informático para la gestión de infracciones de tráfico y seguridad vial, en octubre de 2016 a sus anteriores propietarios.

Decidió abrir una investigación interna, tras verse implicada Aplicaciones Gespol en la operación policial que investiga presuntas irregularidades en las adjudicaciones de semáforos y cobro de multas en ayuntamientos.