Fuentes gubernamentales explicaron a Servimedia que desde el Ejecutivo se concedió a Podemos, en aras del buen entendimiento de esta nueva etapa política, que fuera el que propusiera el nombre de la persona que presidiría el ente público.

Fue, dicen, una “bala de oro” que el presidente Pedro Sánchez les ofreció pero que la formación que lidera Pablo Iglesias no ha sabido aprovechar políticamente al equivocar su estrategia y presentar a periodistas que podían interpretarse como próximos y, a la vez, de fuera de RTVE.

Por un lado, dicen desde Moncloa, el Ejecutivo insistió en que los candidatos debían intentar contar con el “mayor consenso”, o al menos, el “menor rechazo” posible por parte de las distintas “familias” que hay en RTVE.

Así, ven que los candidatos propuestos por Podemos en la negociación abierta con el PSOE se “quemaron” antes de ver la luz por una “mala gestión” política de los próximos a Iglesias, pero en especial del líder de Podemos que se tomó este “gesto” de Sánchez como que él era quien decidía la persona que sería presidente de RTVE y así lo fue contando.

Moncloa optó por quedarse fuera de esta cuestión y dejar claro que se trata de una gestión entre los grupos parlamentarios, por lo que es la portavoz del PSOE en la Cámara, Adriana Lastra, la que junto a Rafael Simancas negocia con Podemos, Noelia Vera y Juan Manuel del Olmo. En estas reuniones, desde el principio, se habla de Andrés Gil y de Ana Pardo de Vera.

Avanzan los días y no se llega a acuerdos y desde el Gobierno perciben que hay algunas “traiciones”, entre las que ven alguna del propio Iglesias, por lo que el presidente insta a su jefe de Gabinete, el sábado desde Bruselas, a que medie en la cuestión.

Una vez que se ponen las cartas sobre la mesa, Del Olmo y Vera acuden a Moncloa, piden “disculpas” al Gobierno por las formas y optan por dejar que sea el PSOE quien finalmente ponga el nombre de la persona que será presidente.

Y es cuando, según dichas fuentes, el Ejecutivo coloca sobre la mesa el nombre de Tomás Fernando Flores, director de Radio 3, el cual había sido uno de las personas que desde el inicio estaba en mente de los socialistas porque “era de la casa”, había sido “mantenido” en su puesto de director por el Partido Popular y tenía experiencia de gestor.

Políticamente, desde el Gobierno reconocen que la gestión de esta negociación les ha “salpicado” pero que la “gran tomatada” se la ha llevado Podemos porque, de tener en su mano demostrar que tiene gente con la que contar y que sabe estar en la Administración, “no ha sabido” lidiar con tema, “ha traicionado” a gente que le era afín y, además, ha dado señas de que estaba en un “mercadeo” de nombres y eso no se lo “perdona” su electorado.