Ambas estuvieron acompañadas por el viceconsejero de Medio Ambiente y Participación del Territorio de la Comunidad de Madrid, Pablo Altozano, y la delegada de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento, Inés Sabanés.

El objetivo de estas jornadas, una vez presentada la estrategia, es convocar a todos los actores implicados para darla a conocer y comenzar un proceso de participación.

En las jornadas, administraciones, entidades sociales, ecologistas y agentes implicados en el tratamiento de residuos conversarán sobre el futuro de la gestión de residuos y los retos que plantea.

La Estrategia de Prevención y Gestión de Residuos es una herramienta de ámbito local dirigida a transformar la gestión de residuos en Madrid en una gestión de recursos “que minimice los residuos producidos y haga el mejor aprovechamiento de los que se generan, minimizando el impacto ambiental de los mismos”, explicó Carmena.

La alcaldesa añadió que la gestión de residuos tiene grandes desafíos a corto plazo, como garantizar que Madrid cumpla con los objetivos tanto de la legislacion nacional como de las directrices europeas, y este hecho "supone numerosas dificultades a superar en poco tiempo debido al retraso sufrido durante décadas en la ciudad en las políticas de residuos".

Ribera afirmó que en estos temas no se trata de gobernar frente a otras instituciones, sino de gobernar juntos y con un mismo objetivo. “Se trata de un desafío muy importante, que entre todos debemos llevar a cabo, porque la transición ha empezado ya”, dijo.

Además pidió solidaridad y participación, porque de este modo “podremos identificar los problemas de manera conjunta y trabajar para cambiar las cosas que no nos gustan”.

Por ello, añadió, el papel de las instituciones “no debe ser indiferente” y “tenemos que hacer partícipe a toda la ciudadanía”. Pero “si no existen infraestructuras va a ser muy difícil hacerlo”, matizó la ministra.