ETA. EL ETARRA ACUSADO DE INSULTAR A GALLIZO ASEGURA QUE SÓLO QUISO “EXPONERLE SUS CRÍTICAS”
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El etarra Asier Tapia, acusado de llamar “fascista” y “exterminadora” a la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, aseguró hoy en la Audiencia Nacional que tan sólo quiso “exponerle sus críticas” sobre “la política de dispersión”.
A pesar de ser el objeto de los supuesto insultos, la propia Gallizo no fue citada como testigo durante la vista oral que tuvo lugar hoy en la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional
Los hechos tuvieron lugar en la mañana del 21 de diciembre de 2007 en la cárcel madrileña de Soto del Real, donde Tapia estaba internado junto con los otros dos acusados, los también etarras Aner Mimenza y Borja Jacinto Urberuaga.
Según la fiscal encargada del caso, Ana Noé, cuando Gallizo abandonaba el teatro de la cárcel durante un descanso de la representación, Tapia se dirigió a gritos hacia ella para dedicarle frases como “fascista, exterminadora”, “responsable de la muerte de nuestros compañeros” o “culpable de la dispersión y del sufrimiento de los presos vascos”.
El etarra, que no quiso contestar a las preguntas del fiscal y sólo atendió a las cuestiones planteadas por su abogado, Íñigo Iruín, negó en todo momento haber insultado a Gallizo.
El acusado, condenado con anterioridad por ser dirigente de Segi, la organización juvenil de ETA, aseguró que su decisión de “exponer” a la directora de Instituciones Penitenciarias sus “críticas” a la “política de dispersión” fue fruto de un “arrebato espontáneo” y que en ningún momento actúo de común acuerdo con Mimenza y Urberuaga.
Según la fiscal Noé, los insultos de Tapia fueron secundados por los otros dos acusados, quienes, según sus tesis, se abalanzaron sobre los funcionarios de prisiones que intentaban acallar a Tapia. Tanto Mimenza como Urberuaga negaron ante el tribunal haber intervenido en ningún momento durante el altercado, ni física ni verbalmente.
A pesar del apoyo de los otros dos acusados, las palabras de Tapia fueron negadas por los funcionarios de prisiones de Soto del Real que intervinieron como testigos en la vista oral. Estos aseguraron ante el tribunal que oyeron “claramente” como el acusado vilipendió a Gallizo, aunque no se pusieron de acuerdo sobre qué insultos concretos le dedicó.
A pesar de que Tapia había afirmado que no se resistió en ningún momento cuando fueron a reducirle, los propios funcionarios aseguraron que el acusado tuvo “una actitud totalmente agresiva y violenta”.
La representante del Ministerio Público atribuye a los tres acusados los delitos de atentado contra la autoridad y desórdenes públicos, mientras que a Tapia le acusa de un delito adicional de calumnias e injurias contra la autoridad.
A tenor de estos delitos, la fiscal Noé pidió para los tres acusados un total de tres años y seis meses de prisión. Además, solicitó que se le imponga a Tapia una multa de 1.800 euros.
El único acusado que hizo uso de su derecho a la última palabra fue Urberuaga, quien aprovechó la ocasión para asegurar que la acusación que pesa sobre ellos es “totalmente falsa y exagerada” y que es fruto de una “venganza” de los funcionarios de prisiones.
Tras escuchar las conclusiones de la fiscal y de los abogado de la defensa, el presidente del tribunal, el juez Javier Gómez Bermúdez, dictó el visto para sentencia.
(SERVIMEDIA)
04 Sep 2009
DCD/pai