Según informó UPTA en un comunicado, “los objetivos de este acuerdo son de vital importancia para el conjunto del sector”, al considerar que “es fundamental conseguir la modernización de un colectivo que necesita evolucionar en la forma de desarrollar su negocio”.

En la actualidad, según indicó UPTA, en España hay cerca de 40.000 autónomos que se dedican a la venta ambulante, de los cuales se desprenden otros 20.000 puestos de trabajo por cuenta ajena. Además, la actividad comercial se reparte por toda España con alrededor de 3.500 mercadillos con más de 173.500 puntos de venta.

“Desde un sello de calidad, hasta el cambio de referencia en la concepción del mercado ambulante”, señala UPTA, es necesario mejorar “la profesionalidad del colectivo, confluyendo la artesanía y la cultura como eje principal”.

Por ello, para UPTA “es sin duda una necesidad el hecho de continuar avanzando en la vertebración de una de las formas más antiguas de hacer negocios”, por lo que su objetivo es “evitar el desplome en ventas que afecta a todo el colectivo”.

“Las ventas de textil y menajes a través del e-commerce no sólo están afectando tremendamente al comercio de proximidad, también están provocando que de la venta ambulante sea prácticamente imposible sobrevivir”, concluye la organización en su comunicado.