En declaraciones a Servimedia, los máximos responsables de ambas asociaciones dejaron claro que esta suspensión no está relacionada con el proceso en el que se decidirá la representatividad de cada una de las organizaciones, sino que simplemente se centra en su registro como tales.

El Estatuto del Trabajador Autónomo establecía que las organizaciones deberían presentar el nombre, los apellidos y hasta el DNI de los afiliados para registrarse. Sin embargo, el Supremo debe decidir si estos requisitos son legales o si, por el contrario, son excesivos teniendo en cuenta que en registros similares no se solicitan.

Sin embargo, ATA y UPTA afirman que en el momento en el que se pretenda fijar la representatividad de cada una de las asociaciones no habrá problema para que el Ministerio de Trabajo, tal y como recoge el Estatuto, reclame estos datos para poder contabilizar los afiliados reales de cada organización.

El secretario general de UPTA, Sebastián Reyna, explicó que "la única consecuencia" que puede tener la decisión del Supremo es "el tiempo", ya que podría retrasar el cierre del registro y, por lo tanto, la fijación de las organizaciones representativas del sector.

Para Reyna, la postura del Supremo no entra "en el fondo de la cuestión", que es el respaldo real de cada asociación, sino que simplemente es un registro.

En una línea similar, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, destacó que el tema de la representatividad "es muy diferente" al que se refiere el Tribunal.

Para Amor, no habrá problemas para fijar la representatividad ya que se utilizarán los mismos datos de afiliación que en otros sectores, como el de los transportistas.