El menor ritmo de crecimiento de este inicio de 2018 se ha dejado sentir más en los indicadores de ingresos (sube un 3,7% en destinos urbanos y apenas un 1,8% en los vacacionales que están abiertos estos meses), que en el empleo, que sigue aumentando de forma notable (+4,8% en las zonas urbanas y +4,1% en las de costa).

Como principal condicionante del inicio de este 2018 que explica la ralentización, Exceltur apunta la "fuerte recuperación" de los destinos competidores con Turquía y Egipto a la cabeza, donde los principales touroperadores han retomado su actividad, programando una mayor capacidad que se acrecentará notablemente en verano. En el período enero-abril de 2018, estos dos mercados han aumentado en 3 millones de turistas (+34,9%), respecto a los mismos meses de 2017.

La desaceleración también es achacable a la pérdida de fortaleza del mercado británico (-1,6% la llegada de turistas en estos 4 meses) en un contexto de avance del proceso de desconexión con la UE, y a las desfavorables condiciones meteorológicas, que han afectado negativamente a los destinos de costa peninsular, Baleares y la España 'verde'.

"MENORES TENSIONES"

De estos cuatro meses, el barómetro destaca como aspectos positivos la "adecuada estrategia de aumento en precios" por parte de una creciente proporción de empresas turísticas, y el buen comportamiento del turismo de negocios, principal fuente de ingresos en la mayor parte de destinos urbanos durante estos primeros meses del año.

También han influido positivamente en los resultados "las menores tensiones derivadas de la inestabilidad política en Cataluña, que ha reducido el ritmo de caída interanual de los ingresos en la ciudad de Barcelona, del -13,4% que registró en el período octubre-diciembre de 2017 al -4,1% de los primeros cuatro meses de este 2018".